Ladival & nieve: el kit esencial de Meri

Muchas veces asociamos en verano y el calor lo de protegernos del sol, de embadurnarnos de pies a cabeza de crema solar y de tener más cuidado con los efectos perjudiciales del astro rey. Hay que recordar pero que, cómo nos contában hace poco en el blog de la farmacia, el protector solar no es un producto de temporada, sino que es imprescindible durante todo el año.

Como deportista y amante de la montaña que soy, durante el invierno estoy expuesta durante más horas a la luz solar, ya que intentamos alargar al máximo las salidas para aprovechar las horas de luz. Y es que, ¿a quién no le gusta pasar todo un día disfrutando de lo que más le gusta?

Y por qué os digo esto? Pues porque yo, como mucha otra gente, cuando salgo a la montaña entre los guantes, las gafas, la chaqueta y demás prendas de ropa en el último que pienso es en cogerme el bote de crema solar y cargarlo arriba y abajo (¡qué pereza!).

ERROR!

La protección de nuestra piel ha sido ser un paso imprescindible en nuestra rutina diaria porque no hay que remarcar que la radiación del sol en las zonas de alta montaña es mayor que a nivel del mar.

Y como lo podemos hacer de una manera cómoda, fácil y útil ??

Este otoño he descubierto un kit esencial para el resto de la temporada, además de ser muy práctico, velará por la salud de mi piel haciendo que sólo tenga que preocuparse de disfrutar del día de esquí, de correr o de cualquier otra actividad que pueda hacer al aire libre.

Se trata del Alpin Sol y Frio FPS30 de Ladival®, que ayuda a proteger la piel del sol y también los labios (¡importante!), Porque lucha contra la deshidratación cutánea provocada por la exposición a climas extremos. Es tan fácil como llevarlo en el bolsillo permanentemente y así ¡seguro que no te olvidas!

Yo por ejemplo lo uso varias veces al día: antes de salir de casa, mientras subo con el telesilla o cuando hago una pausa para comer algo. Es fácil de aplicar y muy cómodo por lo que no me da pereza usarlo varias veces al día, para que no te deja las manos sucias y así puedo seguir con el entrenamiento como si nada.

¡Pero aquí no acaba todo! Una vez terminado el día de sol y nieve toca volver al calor de casa para coger fuerzas para el día siguiente. Es en este momento cuando hay que pensar que nuestra piel, aunque la hayamos sido protegida del exterior, ha sufrido unas condiciones extremas que la han dejado debilitada. ¿Por qué, quien no ha vuelto nunca con las mejillas y la nariz rojos después de todo un día de esquí? O quién no ha tenido nunca la sensación de tener la piel tensa?

Después de todo el día al aire libre la piel necesita recuperarse. Por ello, quería hablaros de la otra parte (y no menos importante) de mi kit essecial. Estoy hablando del Suero Regenerador con FotoliasaLadival®, que me ayuda a calmar la piel y dejarla lista para los retos del día siguiente.

La verdad es que cuando vuelvo a casa después de todo el día haciendo actividad me quedan las fuerzas justas para ducharme, cena y poco más (pero no tengo excusa). Así que lo que hago es dejarme en la mesilla de noche el tubo de suero y ponérmelo justo antes de ir a dormir. Me sorprendió porque es muy suave, no deja rastro en las manos y te deja la piel con una sensación de frescor muy agradable. Tengo que reconocer que se ha convertido en un paso imprescindible en mi rutina diaria porque desde que lo uso, me levanto cada día con la piel hidratada y no tengo que preocuparme por nada más que no sea disfrutar del día al exterior.

¿Y vosotros? ¿A qué esperáis? Como veis, con pequeños pasos durante el día ¡podemos llegar a hacer grandes cosas!